SAN JUAN, PR – Abril 2017 – Aunque en Puerto Rico no se ha aprobado el uso de cámaras de vídeo como parte del uniforme de los oficiales de ley y orden, en muchos estados se está implementando esa modalidad. Los oficiales tienen que tener una cámara pequeña, como las famosas "Go Pro" en su cuerpo en todo momento, prendidas para grabar cualquier intercambio con ciudadanos durante el quehacer del policía. Luego de varios incidentes en los Estados Unidos donde se acusó a policías de cometer abusos de poder y violaciones a las leyes de derechos civiles, muchos grupos ciudadanos están abogando porque las cámaras de uniforme, o 'body-worn cameras (BWC)" sean obligatorias para todos los cuerpos policíacos de la nación estadounidense.

A pesar de esto, no hay estudios sobre la efectividad del uso de estas cámaras para evitar brutalidad policíaca, y la evidencia sobre el efecto que las cámaras tienen sobre los ciudadanos es solamente de anécdotas y muy limitada. Los investigadores del Florida Atlantic University, asistidos por colaboradores de la Universidad de West Florida, se dieron a la tarea de realizar el primer estudio sobre opinión ciudadana en cuanto al uso de las BWC. El estudio se hizo con residentes de West Palm Beach y el condado de Escanbia. Las áreas estudiadas fueron la opinión general sobre el uso de las BWC y el impacto que estas cámaras podrían tener en el trato justo, cantidad de crímenes, desempeño de la policía y la privacidad del ciudadano.

No fue una sorpresa que los resultados del estudio revelaran un 87% de aprobación, donde los participantes consideraron que las cámaras mejorarían el comportamiento de los policías. Un 70% también estuvo de acuerdo en que las cámaras mejorarían además el comportamiento de los ciudadanos en una intervención policíaca.

Sin embargo, la gran sorpresa del estudio fue que, aunque se esperaría que los opositores de la policía y aquellos con una opinión negativa de la uniformada fueran los que están a favor de las cámaras, según los resultados es todo lo contrario. La mayoría de los participantes que apoyaron el uso de las BWC fueron los ciudadanos que ven a la policía de manera positiva y que piensan que en general hacen un buen trabajo. Por otro lado, las personas que más se preocupan por la criminalidad, no piensan que el uso de las BWC resulte en una mejoría significativa. Los investigadores descubrieron que esto se debe a que estas personas no piensan que la policía haga un buen trabajo sin importar si tienen una cámara prendida o no, por lo que no le ven mayores beneficios.

Los residentes de Palm Beach específicamente consideraron que el uso de las BWC por parte de la policía contribuiría a mejorar la seguridad tanto de los ciudadanos como de los policías. Expresaron creer que las cámaras mejorarían el comportamiento de ambos, le daría a la policía mayor legitimidad, y mejoraría la calidad de las evidencias recolectadas. La mayoría de los participantes también pensó que las cámaras evitarían el uso de fuerza excesiva por parte de los oficiales de ley y orden.

Estos resultados van de la mano con la percepción general de los participantes sobre la falta de justicia, cortesía y honestidad de los policías. Entienden que la policía no sabe cómo manejar situaciones difíciles. También piensan que los policías detienen a ciudadanos en la carretera sin razones suficientes, y que tienden a recurrir al uso de la fuerza aún cuando no sea necesario. El estudio, llamado "Community Perceptions of Police Body-Worn Cameras: The Impact of Views on Fairness, Fear, Performance, and Privacy," fue publicado en la revista Criminal Justice and Behavior.

En Puerto Rico esto no se va a dar por el momento - el uso de las cámaras en el uniforme del policía no está aprobado. Sin embargo, hay que reconocer que la percepción pública es que de alguna manera se debe fiscalizar el trabajo del policía para evidenciar el trato justo y legal de los ciudadanos. La globalización mediática contribuye en gran parte a estas dudas y malestar, ya que tenemos las noticias de todos los problemas de exceso de fuerza en la acción policíaca de distintos estados, pero los medios no especifican que cada ciudad y condado tiene una fuerza policíaca diferente, con diferentes entrenamientos y directrices.

No sé si las cámaras per se sean la respuesta a todas estas incertidumbres. Lo que sí pienso es que de alguna manera tenemos que recuperar la confianza de nuestros ciudadanos en el trabajo de la policía. Nuestros oficiales están en la calle luchando contra el crimen y tratando de proteger a la ciudadanía contra los malhechores, muchas veces arriesgando sus vidas. Ese trabajo se duplica si además tienen que luchar contra los ciudadanos que están tratando de proteger, porque éstos no les permiten o le dificultan hacer su trabajo. Cualquier herramienta que ayude a cambiar la percepción ciudadana para que vean a la policía de manera más positiva, debe ser bienvenida.

Fernando Fernández,  PI, BAI, CCDI, CII, CAS

Presidente - Covert Intelligence, LLC

Fernando Fernández se dedica a la investigación privada en el Caribe desde hace más de 10 años con su compañía Covert Intelligence, LLC. Además de ser experto en investigaciones tecnológicas y de informática forense, se especializa en lenguaje corporal y micro/macro expresiones, investigaciones criminales, y ofrece seminarios sobre el arte de la interrogación. Es autor de la novela "Paradise Undercover", basada en sus experiencias en investigaciones en el Caribe.